Buenos Aires en tus pasos

Buenos Aires en tus pasos

Conoce más de Buenos Aires, Desearás venir de inmediato. 

Un paseo por la ciudad de los tangos

La capital de la Argentina es una de esas urbes míticas que posee un estilo personal que el mundo entero reconoce. Su elegancia destaca entre sus calles trazadas según los cánones europeos y su arquitectura parisina, el arte contemporáneo  y las boutiques de última moda. 

Hay mucho que hacer en Buenos Aires: he aquí una pequeña lista de sugerencias para que no te pierdas el verdadero sabor de la Argentina.  

La pasión de la carne

Famosa en todo el mundo por sus platos de res, Buenos Aires es la capital perfecta para los comedores de carnes. Restaurantes como La Cabrera¸ en el barrio de Palermo Viejo, sirven los más selectos cortes sobre tablas de madera: una fiesta para los ojos y el estómago.

Recuerda que los argentinos cenan tarde, normalmente después de las 10 de la noche, así que puedes matar un poco de tiempo antes de ir a la cama en un bar o café tranquilo. El Café Tortoni es una buena opción para esto. 

De compras por Buenos Aires

El barrio de la Recoleta es sede del centro comercial de lujo Patio Bullrich, líder en moda de diseño internacional y nacional. Uno de los mejores recuerdos para llevar de la Argentina son sus famosos artículos de cuero, que pueden adquirirse en la Avenida Santa Fe.

La Feria de San Telmo, en la Plaza Dorrego los domingos, es otra ocasión especial para ir de compras. 

Una oportunidad de lujo para la cultura

El Teatro Colón es el sitio perfecto para disfrutar de la ópera y las representaciones del Ballet Nacional. Pero para ir de museos los más emblemáticos son el Museo Evita y el Museo Carlos Gardel, que cada uno atesora detalles de la vida de estas importantes figuras. Para gozar del tango, nada mejor que ir a la caída de la tarde a la Confitería Ideal.

Un paseo tranquilo

Disfrute de los espacios verdes del barrio de Palermo, como El Rosedal y sus paseos en bote o Jardín Botánico de Buenos Aires. En la Recoleta puede transitar por Pasaje Bollini, del siglo XVIII y cenar en uno de sus pequeños locales gozando de paz y tranquilidad.