Un paseo por Copenhague, la capital danesa
La más mediterránea de las ciudades escandinavas
Hermosa y luminosa, Copenhague se despliega por la costa este del Zealand- la mayor de las 406 islas de Dinamarca-, poseedora de una armonía arquitectónica admirable.
La capital de Dinamarca se sitúa en una isla de la costa este frente al mar Báltico y las zonas que concentran la actividad artística más vanguardista son los barrios del centro y del sur de la ciudad.
Moderna para unos, romántica para otros, la auténtica Copenhague es una cuestión de equilibrio, ya que las ciudades siempre son un reflejo de su vitalidad y en este caso, lo que emana es el factor de la proporción. El equilibrio se percibe incluso al borde del agua en el canal Nyhvan donde se localiza el núcleo primitivo de la ciudad.
Entre el estilizado embarcadero y las casas centenarias que miran al muelle está el Puerto Nuevo que reúne edificios de distintas épocas. Restauradas y pintadas de intensos colores las construcciones se han adecuado a la animación de los numerosos cafés y terrazas donde se degustan desde raciones de frokost tallerken, el típico surtido de arenque, salmón y verduras hasta comidas de varias partes del mundo.
Entre los lugares a recorrer se encuentra el museo de arte Gliptoteca Carlsberg que cuenta con obras de Egipto Antiguo, Grecia y Roma.
Por otro lado se puede visitar Stroget, la arteria comercial de la ciudad, a la cual los daneses la definen como la peatonal más larga del continente. Se trata de un cóctel de vidrieras de las últimas tendencias, puestos ambulantes y cafés. Aquí se alinean las marcas de diseño made in Denmark: los equipos de sonido Bang & Olufsen, las cafeteras de émbolo Bodum y las carpetas Ordning & Reda. Junto a objetos tan prácticos y tecnológicos se exhiben piezas clásicas como las aristocráticas porcelanas Royal Copenhaguen y las vajillas y candelabros de plata Georg Jensen.
También está la plaza del ayuntamiento denominada Radhusplasen donde el ayuntamiento o Radhus es el edificio más famoso por su altísima Torre del Reloj, cuyo punto más elevado, -298 escalones-, está abierto al público. Además cuenta con el Reloj Universal que proporciona un calendario para los próximos 570.000 años. Todo un atractivo.
Otro lugar para conocer es el Puente de Oresud, una pasarela de 16 kilómetros que une la capital danesa con territorio sueco. Esta es una gran obra de ingeniería que se inauguró en el año 2000, luego de construirse una península artificial, más de tres kilómetros de túnel bajo el agua, una isla artificial y un puente colgante sujeto por cables de 7845 metros de longitud.