Brasil: Un Viaje De Samba, Aventuras Y Emoción
junio 10, 2015
¡Cuidado! Lo Que Nunca Debes Hacer En Estos Países
junio 11, 2015
Generalmente se busca viajar y conocer lugares donde los adultos puedan divertirse sin tomar en cuenta a los niños, sobre todo cuando se trata de visitar museos, una opción que no parece ser la más ideal.
Sin embargo, tú puedes aplicar ciertos secretos para que también los más pequeños vean en los museos, una alternativa divertida.
A menudo los padres visitan los museos que están a su alrededor en lugar de buscar a los que les gusten a los chicos. ¿Tienes un hijo que ama a los dinosaurios? Tyrrell Museum en Alberta, Canadá será perfecto. Allí encontrarás fósiles y dinosaurios de variadas especies.
¿Tu hijo quiere ser astronauta? Kennedy Space Center y el Museo aéreo espacial de Washington, D.C son la alternativa.
El arte de calle es una buena opción para los chicos
El arte mural se ve mucho en Philadelphia, USA un paseo repleto de graffitis que también puedes encontrar en Toronto, Canadá o las exhibiciones al aire libre anuales en Sarasota, Florida.
Si vas a París, no será necesario ir al Museo del Louvre, en las calles existen numerosos murales como los de Le Mur des Je t ‘ aime, donde se escribió la frase Te quiero en más de 250 idiomas.
Muchos de nosotros, jóvenes y menos jóvenes, aprendemos mejor a través del tacto y el juego. Busca museos que fomenten la interacción. El Museo de experiencia Music Project (EMP) de Seattle podrán disfrutar de los instrumentos musicales.
Llévalos a la Fundación Barnes en Filadelfia este es un museo bastante amigable para los niños. Los centros de ciencia son siempre un éxito NEMO en Amsterdam ofrece diversión dentro y fuera.
Haz visitas cortas
El secreto de una buena estrategia es dejar a los chicos con ganas de seguir disfrutando. Cualquier espacio será aburrido si te quedas demasiado tiempo.
Haz visitas cortas para que siempre tengas ganas de ir al museo. Si vas a París, en el popular Champ de Mars te llevarás las fotos de la emblemática Torre Eiffel mientras tus hijos disfrutan de la calesita vintage que existe en ese lugar.