Hoteles Muy Tenebrosos

Existen infinidad de lugares realmente fantasmales y tenebrosos en el mundo. 

Sin embargo, tal vez son los hoteles vacíos y habitaciones donde las puertas se abren y cierran solas, los sitios a donde muchos turistas desean llegar para constatar todas aquellas cosas que cuentan las historias de terror. 

Muchos de estos lugares, han sido utilizados para filmar películas o cortometrajes en los cuales se necesitan escenarios realmente aterradores. 

Lo cierto es que para muchos estos hoteles son enigmáticos debido a la gran cantidad de cosas que suelen suceder en ellos sin explicación alguna. 

Hoteles Paranormales 

•The Stanley Hotel – Colorado, USA Este es el hotel favorito que sirve como inspiración en muchos de los escritos y películas de Stephen King. Una de las películas de terror de Hollywood con mayor popularidad es "The Shining", que fue grabada casi en su mayoría en este famoso Hotel que se ubica en Park, Colorado. Se dicen que aquí habitan fantasmas quienes tocan instrumentos, abre y cierran las puertas de las habitaciones. 

•Parador de Cardona - Barcelona, España la habitación con el número 712 ubicada en el piso 7, da cabida a infinidad de leyendas e historias en este hotel donde muchas de las mucamas y botones aseguran que los muebles se mueven solos y se escuchan risas y llantos. Esta edificación fue antiguamente un castillo que data del siglo IX y se sabe que sus dueños fueron los Duques de Cardona.

•Hotel Decebal - Rumania Este hotel está situado en el país donde se dice existió el famoso Conde Drácula. La estructura fue construida desde hace 150 años y los turistas aseguran haber visto una mujer rondar por las habitaciones con un vestido blanco. Se dice que en el hotel, fue enterrado un viejo tesoro romano y que este espanto es quien se encarga de cuidarlo.

•Grand Hotel Langham – Londres, Inglaterra Ha alojado a famosos ingleses como Oscar Wilde y Mark Twain. Esta estructura de la época victoriana tiene más de 140 años y muchos de quienes se han hospedado en él aseguran haber visto fantasmas pasearse por los pasillos del hotel. Especialmente en la habitación 333.